Es bien sabido que el romero es una planta que nos ayuda a generar calor y movimiento, pero ¿por qué sucede esto exactamente? Su mecanismo de acción es hermoso y ya van a ver… hoy les traigo info bonita del sistema circulatoriooooo para entender más sobre cómo trabaja esta plantita originaria del Mediterráneo.

Bueno, resulta que el aparato circulatorio está compuesto por el corazón, un montón de conductos híper ramificados (venas, arterias, capilares, etc.) y la sangre o Xue, una de nuestras cinco energías vitales. Según la Medicina Tradicional China, sin un sistema cardiovascular bien equilibrado puede ser difícil conectar con el flujo de energía universal, la fuerza serena del Tao, esa cosa sin nombre que mueve la vida, que lleva y trae abundancia, amor, salud… TO-DO-LO-RI-KOOO.

Así como ese flujo sucede infinitamente a niveles cósmicos, dentro de nosotros también está ocurriendo un intercambio de energía súper importante que ponemos en buenas manos cuando tomamos una infusión de romero, por ejemplo. Esta plantita contiene rosmanol, ácido rosmarínico y otros compuestos que la hacen excelente para aumentar la temperatura corporal y poner la sangre en movimiento, y trabaja sobre todo a nivel capilar. Los capilares son los vasos sanguíneos más pequeñitos de nuestro sistema circulatorio y sus paredes son tan delgadas que permiten que el oxígeno y los nutrientes pasen desde la sangre a los tejidos y que los productos de desecho hagan el recorrido inverso. Es decir, dependemos del buen estado de los capilares para que nuestros órganos no solo reciban todo lo que necesitan sino entreguen lo que ya no les sirve.